lunes, 7 de abril de 2014

Lo despojado

Cuando la pobreza es una forma de poder, de exigir, ya no es pobreza, ¡es poder!. Y cuando a la pobreza se le añade un “para”, tampoco es pobreza: Cuando alguien es pobre “para” ser santo, “para” ayudar, “para” lograr… no es pobreza, porque ¡la pobreza siempre es debilidad!. Una pobreza hecha desde mí no es pobreza. Despojo auténtico no es el que yo hago (porque lo haré a mi medida), sino el que me viene de fuera. Y… verdaderamente, seré libre cuando soy pobre. Y… ¡seré pobre cuando soy libre!. Libertad, pobreza y humildad son hermanas.